VII CARTA A MARIO VARGAS LLOSA
Política y
literatura
José Luis Ayala
Apreciado
Mario:
Un documento histórico sin precedentes en la
Historia de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, como en la cultura
peruana, ha sido emitido por docentes miembros de la Asamblea Universitaria.
Solicitan al rector de esa casa de estudios superiores, el retiro de la
condecoración “Medalla de Honor Sanmarquina” en el Grado de Gran Cruz, otorgada
el 31 de marzo del año 2011.
Entre otras
consideraciones de carácter académico y político señalan que el régimen
dictatorial de Fujimori, vulneró los derechos de docentes y estudiantes:
“Alberto Fujimori –dicen– ocupó militarmente nuestra casa de estudios por
muchos años en la década de los noventa e inició una cacería política y
académica contra nuestros docentes y estudiantes de la época. Su autocracia
configuró un orden social que despreciaba la libertad. Además su actividad de
corrupción colocó al país en una situación que lo impregnaba casi todas
nuestras dimensiones sociales. Por tanto, la familia Fujimori es un símbolo de
nuestras épocas más oscuras y es antagónica a todo principio de convivencia
sana y esperanzadora,
El
patrocinio de Vargas Llosa a los Fujimori traiciona todo principio democrático
al solicitar abiertamente apoyo para el partido del grupo del dictador que
intervino y militarizó nuestra universidad peruana. En consecuencia, está
contra todo aquello que nuestra universidad encarna: la libertad, el pluralismo
y la autonomía. Los sanmarquinos de la generación de los noventa tenemos
memoria.
Es por ello,
como miembros de la Asamblea Universitaria, máximo órgano de gobierno
institucional, solicitamos públicamente que se retire el Doctorado Honoris
Causa al señor Mario Vargas Llosa. 12 de mayo del 2021. Juan Antonio Bazán
Chávez. Facultad de Derecho y Ciencias Políticas. Rubén Quiroz Ávila. Facultad
de Letras y Ciencias Sociales. Luis Montoya Canchis. Facultad de Ciencias
Sociales”.
En esa oportunidad se te distinguió en mérito a tu brillante aporte a la literatura
peruana, así como a la cultura y literatura mundial. Pero sobre todo: “Por tu
permanente como infatigable defensa de la vida, los derechos humanos y la
democracia”. El acto solemne se realizó en la Universidad Decana de América en el
Salón General del Centro Cultural de San Marcos (C.C.S.M.).
Tu discurso de agradecimiento fue
magistral, como siempre memorioso, académico y lleno de anécdotas. Te referiste
al Grupo Cahuide, cuando estudiabas el primer año de Letras en San Maros y
eras un activista comunista. No podías
dejar de nombrar a Félix Arias Schereiber, Lea Barba, Héctor Béjar. Por
supuesto rememoraste la criminal dictadura del general Odría y Alejandro
Esparza Zañartu, Ministro de la Represión, que de comerciante de pisco y
alcohol, pasó a ser un letal enemigo de simpatizantes de militantes aprista y
comunistas.
En
esa oportunidad dijiste: “Los años sanmarquinos fueron para mí fundamentales
desde el punto de vista intelectual, desde mi formación literaria y también desde
mi formación cívica. Nunca me he arrepentido de haber ingresado a la
Universidad de San Marcos y haber pasado aquí seis años”. “San Marcos había
sido a lo largo de su historia una institución inconforme, rebelde, donde se
había soñado con un porvenir distinto para nuestro país. De esta universidad,
no hay que olvidarlo, han salido las grandes figuras intelectuales del Perú,
figuras que tanto en los dominios científicos como en las humanidades han
representado la flor y nata de nuestro país”. “San Marcos es una institución
antigua, como decía Arguedas, la antigüedad es un valor, y pues uno de los
valores peruanos es esta universidad, la más antigua de América, siempre un
foco extraordinario de ciencia, de trabajo intelectual, de investigación, de
creación, y también una institución que ha luchado incesantemente por la
libertad, por un mundo mejor que el que tenemos, por un mundo de mayor
igualdad, de mayores oportunidades, de mayor tolerancia, un mundo sin
violencia, sin represión, un mundo que esté de alguna manera a la altura de las
mejores cosas que ha dado a lo largo de la historia nuestro país”.
Y ahora que distinguidos docentes de la Universidad Nacional Mayor de
San Marcos, piden al rector que anule, quede sin efecto, revoque o retire la condecoración “Medalla de Honor
Sanmarquina” en el Grado de Gran Cruz que se te otorgó, deberías automáticamente
devolver el pergamino y la “Medalla” para de esa manera mostrar coherencia
entre o que dice y haces.
Por supuesto, no devolverás nada y tampoco
votarás en España por Keiko Fujimori Higuchi. Tampoco vendrás al Perú para ser
coherente. Pero deberías dar el ejemplo no solo para ejercer tu derecho
ciudadano y ser un ejemplo de fujimorista tránsfuga y converso. Tampoco vendrá
Álvaro que oficia de relacionista público. Rentado ideólogo del neoliberalismo
y escritor amparado por tu prestigio, cumplió una terea política, al haber
invitado a la señora K., en nombre tuyo al “Foro
Iberamericano: Desafíos de la libertad”. Jamás, manan, janiwa, never, jamais el fujimorismo, nunca te
agradecerá. Es una pena que termines siendo un fujimorista convicto y confeso.
Muy mal. Muy mal.
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